Hoy es una semana que nos conocimos, es uno de los días más felices de mi vida, será muy pronto dirán algunos pero las ilusiones están ahí y las esperanzas crecen cada día. Nos conocimos en una sala de conversación, intercambiamos msn, puse que estaba triste no recuerdo porque, él se fijó en eso y quiso ayudarme, eso m gustó mucho el gesto de querer apoyarme en un momento difícil. Llamó mi atención que fuera amable y solidario. Conversamos de manera interdiaria hasta que quedamos en salir el sábado pasado es decir el sábado 27 de febrero, el último sábado del mes. Quedamos en vernos en un lugar público, él me había visto por cam y yo no. Cuando llegué con cierto retraso en la hora acordada además. Él me esperaba y me ubicó rápido, caminamos por las calles sanborjinas, hablamos de todo un poco, él hablaba más en realidad, me pareció quería ser escuchado y eso hice escucharlo. Caminamos hasta un paradero donde hizo la recarga de su móvil, fue tan natural en eso, yo me habría complicado y habría hecho no sé qué, pero él no él fue a la bodega, fuimos los dos pidió ese servicio y ya. Ya lo había hecho. Me agradó eso su naturalidad para decir y hacer las cosas.
Esperamos un ómnibus y fuimos ver dónde iriamos pasamos por una disco era muy bullera, fuimos a otro pub y en este rendían tributo a Santana, me consultó si quería entrar: "la dama decide" me dijo, como no quise ir ahí swguimos elgiendo y llegmos a otro lugar donde había mucha bulla salí rápido y él me siguió, me dio gusto, hasta que dimos con un lugar apropiado al menos al gusto de los dos y fuimos a bailar, pedimos una botella de vino y platicamos harto, bailamos también. Mientras conversábamos intento besarme en los labios me hice la desentendida, pero en su segundo intento lo dejé quería que lo hiciera además yo quería que me besará. Fue un lindo beso, muy dulce, muy suave, muy tierno y sentí que lo deseaba. Sentí emociones que no sentía.
Quedamos en vernos todos los sábados, pero para que no sea muy seguido y que no sea solo de sábados, salimos el viernes, fuimos a tomar un jugo de piña yo y él un jugo surtido. Conversamos harto de su familia de la mía. caminamos tomados de la mano con las manos entrelzadas y luego me tomo por la cintura, es agradable sentir sus manos como pañuelos de seda.
Te quiero mucho César...
Y esto pienso hoy...
